Este es el cartel que puso en la vereda un matrimonio de comerciantes que ayuda con comida a los que menos tienen. Soledad contó cómo nació esta acción solidaria.
Un joven matrimonio decidió crear una pequeña canasta solidaria para ayudar con comida a los que menos tienen y sufren hambre todos los días.
Es que Soledad Barboza (25) y su esposo Santiago Llorente (22) tienen un minimercado ubicado en la esquina de Belgrano y Moreno, frente a la Dirección de Vivienda del Municipio. Ambos tenían por costumbre embolsar el pan que no se comercializaba en el día y lo ofrecían a la siguiente jornada a un precio mucho más barato.
Esa idea empezó a mutar cuando Santiago le propuso a Soledad la creación de una canasta solidaria y regalar el pan considerado «viejo» por los habituales clientes.
Es así que frente al comercio colocaron en una caja de cartón el pan embolsado y pusieron un cartel con la leyenda «Si lo necesitas, llevalo ¡Es gratis!».
«Ideamos esta forma para evitarle a la gente la vergüenza de pedir comida. Ellos pasan se sirven de la caja y siguen su camino», dijo Soledad, una joven criada en el distrito de Las Malvinas y madre de un bebé de un año.
La idea nació con el sobrante de pan y ahora se le sumó la verdura o fruta que no se vende. «Mi esposo me dijo que si nos está yendo bien por qué no ayudar a los demás y yo comparto esa filosofía de vida, porque cuando eramos chicos veía como a mi padre le costaba ganarse el dinero y muchas veces le pedíamos una ayuda a los vecinos».
Según Susana, «la mayoría que se sirve de la caja siempre deja para los demás. No se llevan todo por una cuestión solidaria» y agregó que «muchos adultos usan esta ayuda y también chicos, tenemos dos o tres que pasan todos los días y se llevan algo de comer».
La comerciante aclaró que «esta no es una forma de promocionar nuestro comercio, lo hacemos de corazón por ayudar a los que menos tienen. Al principio muchos tenían vergüenza y nos pedían permiso para llevarse al pan».
Lo cierto es que la joven madre destacó que «todos los que se acercan sólo piden comida y no dinero. La mercadería que ofrecemos se repone todos los día por la mañana y por la tarde».